La interrupción Legal del Embarazo (ILE) en el país es un
tema lleno de polémica que ha afectado a
cientos de mujeres que no han podido practicarse un aborto en condiciones
salubres. El estado de Oaxaca es uno de los que más ha sufrido por falta de
leyes que protejan a las mujeres. De acuerdo con cifras de los Servicios de
Salud de Oaxaca se estima que al año se realizan más de 11 mil abortos en
condiciones clandestinas, poniendo en grave riesgo su salud.
Y es que el estado sólo ha realizado modificaciones a la ley
basadas en estereotipos tradicionales que afectan a sus habitantes. Por ejemplo
en Oaxaca y otros cinco estados (Tamaulipas, Yucatán, Nayarit, Puebla y
Zacatecas) si una mujer aborta se le puede imponer una pena menor que va entre
los cuatro meses y los dos años de prisión siempre y cuando el juez decida que “no
tenga mala fama”.
Especialistas en el tema aseguran que el ILE en México debería ser un tema de salud
pública y no deberían existir conceptos como “mala fama” porque lo único que
logran generar es un ambiente de falta de respeto donde las mujeres pueden ser
juzgadas públicamente por sus actos. Y
un juez puede decidir subjetivamente por ella, cuando la única que debería
tomar una decisión sobre su cuerpo es ella.
Durante el Día por la Acción de la Salud de las Mujeres un
grupo de oaxaqueñas se reunió en las inmediaciones del Hospital Civil de la
capital del estado para exigir a los diputados locales la legislación para
despenalizar el aborto en la región.
Algunas mujeres que no encuentran alternativas legales ante
esta situación han optado por buscar soluciones como viajar a la Ciudad de
México donde el aborto es legal hasta las 12 semanas de gestación, pero hay
otras que no tienen los recursos para realizar el viaje por lo que se ven en la
necesidad de adquirir clandestinamente pastillas para aborto
corriendo el riesgo de que éstas no tengan el efecto adecuado por no ser
recetadas y administradas bajo la vigilancia de un médico especialista.
0 Comentarios